
Se analizaron a mas de 43 mil personas, el 65% de las que dormían menos de 5 horas diarias tuvo más riesgo de muerte.
Las personas que duermen poco son más propensas a enfermedades cardíacas, hipertensión, derrames cerebrales y al síndrome metabólico (conjunto de afecciones como la hipertensión arterial y la glucosa alta que ponen en riesgo a quienes la padecen de desarrollar diabetes tipo 2 y enfermedades cardiacas).
Las personas que duermen menos de seis horas diarias tienen tendencia a padecer ansiedad, angustia y depresión.
Se ha comprobado que dormir menos de seis horas empeora la salud bucal, en específico, conduce a enfermedades de las encías. Además, si se padece el bruxismo, que consiste en apretar y rechinar los dientes, estos se pueden romper y se provocan heridas en el interior de la boca debido a la presión ejercida.
Establece un horario regular, despierta a la misma hora y duerme a una hora fija. No duermas hasta tarde los fines de semana, porque si lo haces desajustas tu reloj biológico. Mantén tu habitación fresca, olvídate de la calefacción, así tu cuerpo tendrá una temperatura ideal para comenzar a descansar.
Una buena higiene dental, cepillado, enjuague bucal y el uso de hilo dental, te ayudarán a dormir más tranquilo. Durante la noche la producción de saliva es menor y las bacterias se reproducen más y más rápido, por eso es importante tener los dientes bien limpios, además de que así no te levantarás con mal aliento.
Es importante que no dejes conectados dispositivos electrónicos con luces, que ninguna pantalla se quede encendida y no olvides apagar las luces.
La cafeína permanece en el sistema nervioso por alrededor de seis horas, por eso, si quieres dormir bien, será mejor que disminuyas el consumo de esta bebida.
En lugar de vino o café, prefiere tomar té.
¡Ahora sí, dulces sueños!